En el décimo Congreso de la Asociación de Semillas de las Américas (SAA), realizado en Foz de Iguazú, Diego Risso, Director Ejecutivo de la SAA, destacó la importancia del evento como un punto de encuentro técnico, comercial y regulatorio para toda la cadena semillera. El congreso reúne empresas grandes y pequeñas, cooperativas, institutos de investigación y autoridades regulatorias de más de 15 países, creando un espacio único para debatir innovación, edición génica, biotecnología, fitosanidad y propiedad intelectual. Según Risso, productores y consumidores son quienes impulsan la investigación, enviando señales sobre la necesidad de alimentos más saludables, cultivos más productivos y sistemas más sostenibles. El rol de los gobiernos es clave para asegurar marcos regulatorios basados en ciencia que generen confianza y permitan que nuevas variedades lleguen de forma segura al mercado. Risso resaltó también la alta calidad de los participantes y el valor de las decisiones y acuerdos que surgen en este ámbito internacional.


